
Aún, después de una semana de verla, se me dibuja una sonrisa en la cara al pensar en esta cinta. ¿Qué como me hace sonreir una película sobre un secuestro? Cuando la hayas visto te responderás a tí mism@.
El comienzo es flojillo, todo hace pensar que va a ser similar a otras películas de la misma temática, pero de pronto ves la luz a través del tunel, perdón, del zulo. Y es que esta entretenida, agobiante y por momentos divertida película hace un buen homenaje a los clásicos del género, perdón, los géneros pues aún no se en cual enclavarla.
Todo esto es posible gracias a los cuatro y únicos actores que vemos en el film: Mary Elisabeth Winstead, John Goodman, John Gallagher Jr. y Suzanne Cryer, bien dirigidos por Dan Trachtenberg el cual se estrena como director de largometraje.
La fórmula teatral, el número reducido de localizaciones, un desenlace sorprendente y un bailecito de John Goodman hacen que merezca la pena verla. No pretendo engañarte, no es sino un entretenido y gamberro experimento. Pero me encantan las gamberradas cinematográficas.
Muy acertado el cartel. El título no tanto, sobre todo para el público no angloparlante, pero decidieron cambiar el título original del guión The Cellar, por la similitud en algunos puntos a la película Coverfield.
Supongo que no pierdes el tiempo si le echas un ojo. Eso sí, te recomiendo que la veas entera y no la dejes a medias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario